Un proyecto cuya concreción era anunciada por los políticos en la perorata preelectoral, arrogándose la autoría, la gestión y todo lo que le sumara los votos de una comunidad que sufría –y aún padece- las consecuencias de la falta de un sistema de evacuación de excretas sanitariamente apto, pues las aguas residuales pueden provocar contaminación ambiental, enfermedades graves en el ser humano y transformaciones severas al ecosistema, dado que se componen de las sustancias orgánicas y minerales que vienen de la materia fecal y otros desechos.

Todos nuestros gobernantes elegidos democráticamente han solicitado y gestionado este proyecto. Gratamente, en el 2.012, el CFI (Concejo Federal de Inversiones) publica el Anteproyecto definitivo del sistema cloacal para Añatuya. Posteriormente, en el 2.018  se obtiene el ansiado financiamiento del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), lo que se anuncia con “bombos y platillos”, pero tendríamos que esperar tres años más.

Y es que no se podía avanzar ante la falta de un espacio adecuado para la ejecución de esta obra. Recién en mayo del 2.021 se da un importante paso hacia la concreción de LAS CLOACAS, pues se necesitaba de un terreno, el que es donado al Gobierno de la provincia de Santiago del Estero, por Domingo Antonio Tonani y Máxima Adela Tonani quienes, a través de la Escribanía de Gobierno, “donan y transfieren a favor del Gobierno de la provincia de Santiago del Estero, una fracción de terreno” donde se instalará la Planta de tratamiento de líquidos cloacales.

Este enorme acto de solidaridad, generosidad y desprendimiento de la familia Tonani en beneficio de todo un Pueblo, acelera el proceso y el viernes 2 de julio de 2.021, se publica en el Boletín Oficial, el llamado a Licitación por un “…presupuesto oficial cercano a ARS 2.922M a valores de Mayo 2.021…”  El proyecto de obra incluye –entre otras especificaciones-, “…una planta de tratamientos cloacal tipo lagunar de 7.500 m3/día y 110 kilómetros de redes de distribución de agua potable o cloacas.

El 14 de julio de 2.022, los diarios provinciales titulan “día histórico” a este jueves en el que llegan las empresas e inician los análisis de suelo y la construcción de talleres y depósitos de materiales. El sueño, las promesas comienzan a hacerse realidad.

A un año de aquella histórica jornada para los añatuyenses, apreciamos el avance de la obra que hoy se extiende por la avenida San Martín y aunque a su paso moviliza suelos, veredas, corta calles y rompe pavimentos, debemos apreciar  el progreso que llega y como todo CAMBIO, desequilibra, rompe, quiebra lo que estaba estático y reposado.

 Deseamos que esta transformación de la infraestructura urbana que se ha iniciado nos movilice a reconstruirnos como sociedad, evidenciando nuestras ambigüedades, fallas y contradicciones para también transformarnos y avanzar!