Inició el invierno esta semana y la inestabilidad climática, sumado a otros factores, hicieron crecer abruptamente los casos de gripe, sobre todo en niños. Sin embargo, por su característica de contagio, hay una gran cantidad de grupos familiares afectados por la misma patología. Ante esta situación, se pide extremar las medidas de prevención para evitar los contagios masivos de esta enfermedad que afecta cada vez a más santiagueños.

El Dr. Ángel Muratore, médico pediatra llamó a toda la comunidad a tomar los recaudos necesarios ante esta nueva ola de contagios. El profesional detalló que "la gripe se hizo presente en el inicio del invierno. Las bajas temperaturas y la circulación viral condicionaron la aparición de numerosos cuadros respiratorios que afectan a adultos y niños, saturando la demanda de atención en guardias y consultorios médicos".

Este incremento de casos originó un fuerte ausentismo en las escuelas y en los lugares de trabajos, debido a que requiere reposo absoluto para su control, explicó Muratore.

Hay síntomas más específicos, a los cuales se deben controlar constantemente, y en este sentido el pediatra sostuvo: "Congestión nasal, tos, fiebre, decaimiento y dolor de cuerpo son los síntomas más frecuentes, y que condicionaron ausentismo escolar en los niños y laboral en sus padres. Por la característica forma de contagio interpersonal, es frecuente ver a más de un integrante de la familia afectados, y a muchos compañeritos de un mismo grado".

Si bien se trata un cuadro viral, que normalmente luego de una semana a diez días suele autolimitarse, "debemos tratar de controlar y manejar los molestos síntomas, estando atentos a posibles complicaciones (bronquiolitis, bronquitis, neumonías) sobre todo en los niños más pequeños o que presentan alguna enfermedad de base (cardiopatías, prematuros, secuelares neurológicos, diabéticos)", aconsejó.

Asimismo resaltó que "a fines del mes de marzo, la vacuna contra la gripe estacional cepa 2023 ya fue distribuida por el Ministerio de Salud en hospitales y Upas, siendo obligatorias en pequeños de 6 a 24 meses, embarazadas, puérperas, mayores de 65 años, y pacientes con enfermedades crónicas".

La prevención se basa en evitar el contacto con personas enfermas, alimentar e hidratar adecuadamente a los niños, sobre todo insistir con el pecho materno y completar sus calendarios de vacunación, indicó el pediatra, Dr. Ángel Muratore. Ventilar la casa, cumplir con el reposo y no mandar a los chicos a las escuelas o a sus actividades extraescolares hasta el alta médica es fundamental.

"Ante la persistencia de los síntomas o la aparición de complicaciones (dificultad respiratoria, agitación, rechazo al alimento, imposibilidad de dormir), sobre todo en los menores de un año, no dudar en consultar al médico y evitar automedicar", resaltó el especialista.

Las poblaciones más vulnerables frente a las enfermedades respiratorias de invierno tienen que ver con las "edades más extremas de la vida" como lo son los más pequeños y los más grandes porque "en ellos su sistema inmunológico no está en pleno funcionamiento", advirtió Maximiliano Gómez, presidente de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica.

"Debemos ayudarlos y tratar de evitar el contacto cercano de los más pequeños con personas que están tosiendo o estornudando. En los adultos mayores el uso de barbijo les va a ayudar a evitar contagiarse", señaló.

Las personas que tienen algún tipo de problema de salud como, por ejemplo, personas con cáncer en tratamiento con quimioterapia, personas que tienen tratamiento inmunosupresor, enfermedades autoinmunes o inmunoagresivas tienen condiciones para que no funcione plenamente su sistema inmunológico y deben tomar precauciones en esta época, advirtió Gómez.

"Hay enfermedades como el asma, el Epoc, pacientes con fibrosis pulmonar, u otras enfermedades como bronquiectasias que por más que no tengan una virosis o una gripe pueden exacerbar o tener crisis o ataques que son empeoramientos agudos de la enfermedad y de los síntomas", explicó la neumonóloga Ana Stok. "Pueden tener mayor falta de aire, tos crónica, silbidos en el pecho", agregó