28/05/2025
Murió Ngugi Wa Thiong’o, uno de los escritores más influyentes de la literatura africana

Fuente: telam
El autor keniano, exiliado en Estados Unidos desde 1982, tenía 87 años. Su obra reflejó los pesares y contradicciones de la sociedad poscolonial de su país, del racismo a la crisis económica
>Durante su encarcelamiento, el autor keniano Ngugi wa Thiong’o decidió que nunca volvería a escribir en inglés, un movimiento desafiante que ayudó a colocar firmemente la literatura en lenguas africanas en el mapa.
Ampliamente considerado como el escritor más influyente de África Oriental, Ngugi buscó forjar un cuerpo de literatura que reflejara la tierra y la gente de la que provenía, en lugar de seguir los pasos de la tradición occidental. “Creo profundamente en la igualdad de las lenguas. Me horroriza completamente la jerarquía de los idiomas”, dijo en una entrevista en 2022 desde California, donde vivía en un exilio autoimpuesto.
El escritor, de voz suave, también vivió una vida tan dramática como sus novelas. Su crítica a la Kenia poscolonial —describiendo la violencia de la clase política y de los nuevos ricos como “la muerte de las esperanzas, la muerte de los sueños y la muerte de la belleza”— lo llevó a frecuentes enfrentamientos con las autoridades.
Nacido como James Ngugi en una familia campesina numerosa en la región de Limuru, en el centro de Kenia, el 5 de enero de 1938, pasó los primeros 25 años de su vida en lo que entonces era una colonia británica de colonos.Sus primeras obras estuvieron fuertemente influidas por la lucha de su país contra el dominio colonial y la brutal guerra de Mau Mau de 1952 a 1960. En su primera colección de ensayos, Homecoming, se describió a sí mismo como un “extraño en su propio país”. Pero posteriormente su indignación se extendería a las desigualdades de la sociedad keniana poscolonial, ganándose la ira del gobierno.En 1977, Ngugi y el también escritor Ngugi wa Mirii fueron encarcelados sin cargos tras la representación de su obra Ngaahika Ndeenda (“Me casaré cuando quiera”).“Escribí en el único papel disponible para mí, que era papel higiénico”, relató al medio estadounidense NPR. Amnistía Internacional lo nombró prisionero de conciencia antes de que una campaña mundial asegurara su liberación de la prisión de máxima seguridad Kamiti en diciembre de 1978.
Ya en 1965, la novela The River Between (El río dividido) inició un examen crítico del papel del cristianismo en un contexto africano. “Si la religión del hombre blanco te hacía abandonar una costumbre y luego no te daba algo de igual valor, quedabas perdido”, escribió.Cuando Ngugi volvió a su país en una visita en 2004, fue recibido por multitudes de seguidores en el aeropuerto de Nairobi. “Regreso con una mente abierta, un corazón abierto y brazos abiertos”, declaró. Días después, él y su esposa fueron atacados por hombres armados: ella fue violada y él golpeado. No quedó claro si el robo fue el único motivo o si el ataque tuvo motivaciones políticas.
Margaretta wa Gacheru, socióloga y exalumna de Ngugi, lo describió como un ícono nacional. “Para mí, es como un Tolstói keniano, en el sentido de ser un narrador, de su amor por el lenguaje y su visión panorámica de la sociedad, su descripción del paisaje de las relaciones sociales, de las clases y las luchas de clases”, destacó.Desde las crecientes desigualdades económicas hasta el trauma persistente del racismo, los temas planteados en sus obras siguen siendo relevantes en Kenia y más allá, algo que no pasó desapercibido para su creador. “Soy un activista, quiero ver cambios”, declaró. “Espero que podamos seguir luchando por ese mundo. No podemos rendirnos”.
Fuente: AFPFuente: telam